Con el desarrollo y la fabricación de sus diafragmas, Focal amplía los límites de la innovación en acústica. La membrana "W" o "sandwich" de los altavoces desempeña un papel esencial en la reproducción del sonido. Está formada por dos láminas de vidrio colocadas a ambos lados de un cuerpo central de espuma; una construcción en sandwich que permite un gran control sobre los tres parámetros clave para un buen altavoz: ligereza, rigidez y amortiguación. Esta membrana emblemática del saber hacer de Focal optimiza perfectamente la curva de respuesta en frecuencia, proporcionando un bajo nivel de distorsión y una total transparencia de escucha. El sonido es de máxima precisión.

La forma y los materiales de los diafragmas son esenciales para una reproducción de alta fidelidad. Para conseguir unos agudos excepcionales, nuestros ingenieros han desarrollado el tweeter de cúpula invertida en berilio puro. Gracias a su inigualable rigidez, el berilio es el material elegido para los altavoces de alta frecuencia. Desarrollada y patentada por Focal, la cúpula invertida de berilio puro es capaz de cubrir más de cinco octavas (1.000 - 40.000 Hz) para una perfecta percepción de los microdetalles del sonido.

El rendimiento de un altavoz está directamente relacionado con la energía magnética que transmite el imán. Para desarrollar woofers de alto rendimiento, nuestros ingenieros crearon el imán multiferrita, o tecnología Power Flower, que reúne varios anillos de ferrita apilados distribuidos alrededor del núcleo central. Esta tecnología combina una energía magnética transmitida muy elevada, para multiplicar por diez la potencia, con una refrigeración óptima del driver: la separación entre los bloques permite la libre circulación del aire caliente, garantizando una ventilación sin igual de la bobina. Como se calienta menos, ya no actúa como limitador de potencia, incluso tras una escucha prolongada a niveles sonoros elevados. Otra ventaja es que la bobina se descomprime al estar completamente abierta al exterior: la distorsión, ligada a los fenómenos de compresión mecánica, se reduce considerablemente. Esta tecnología es una firma exclusiva de Focal desde hace muchos años.

Como la superficie de una caja acústica es mayor que la de los diafragmas de los altavoces, puede irradiar sonidos distorsionados por las resonancias de la estructura de la caja. Esto altera la reproducción y difumina la imagen sonora. Para evitar estas "interferencias", es esencial que la caja acústica sea lo más inerte posible, que no sea emisiva. En Focal, utilizamos MDF (fibra de densidad media) para conseguir esta inercia. Esta estructura estable y pesada es antivibratoria. Se optimizó mediante una cartografía vibratoria de las paredes del altavoz para reforzar o modificar la estructura allí donde apareciera un punto débil.

Aunque nuestros ingenieros son expertos en el desarrollo de membranas exclusivas, también innovan en todos los elementos que componen los altavoces, como la suspensión que une la membrana al marco, donde es vital controlar el comportamiento. Introducida en 2015, la tecnología TMD (Tuned Mass Damper) con amortiguación armónica consiste en añadir pesos toroidales finamente posicionados para estabilizar la suspensión y conseguir una neutralidad sónica aún mayor. Esta tecnología mejora el rango medio y el comportamiento errático de la envolvente entre 1 kHz y 2 kHz.

Para obtener un sonido de muy alta definición, es esencial controlar el campo magnético que circula por los altavoces. Nuestros acústicos han creado un circuito magnético de increíble estabilidad que garantiza un sonido perfectamente controlado: la tecnología NIC (Neutral Inductance Circuit). Patentada, esta tecnología consiste en un anillo de Faraday cuyas dimensiones, material y posicionamiento están optimizados para que el campo magnético sea estable y el sonido muy preciso.